Con la resaca de las elecciones de este domingo en España, vengo a hablaros de las elecciones que están teniendo lugar estas semanas en la India. Sí, habéis leído bien: duran semanas. «La gran fiesta del país», como la denomina el logo de este año («Desh ka maha tyohar»), comenzó el 11 de abril y terminará el 14 de mayo. Tras siete fases de votación, el recuento se realizará el 23 de mayo, cuando los resultados al fin saldrán a la luz.
Estas elecciones tienen por objetivo formar la 17ª Lok Sabha o «Casa del pueblo», que sería el equivalente al Congreso. Los 543 congresistas que formarán esta cámara se eligen por sufragio universal (a partir de los 18 años desde 1988; antes había que tener 21) y mayoría simple. El primer Lok Sabha se formó en 1952, tras el fin del Raj británico en 1947.
Los escaños para el congreso se dividen por estados (similar al modo en el que dividimos por comunidades autónomas en España), y cada estado tendrá un número de escaños determinado por el número de habitantes. Asimismo, los estados se dividen en circunscripciones siguiendo este mismo método.
¿Y por qué no se celebran en un día y ya, como hacemos nosotros? Pues porque son mucha gente. Cada estado vota en una, dos o tres de las fases normalmente, pero aquellos con más escaños votan en las siete: Uttar Pradesh (80 escaños), Bengala Occidental (42 escaños) y Bihar (40). Maharashtra (el estado cuya capital es Mumbai) tiene 48 escaños, pero votan en cuatro de las fechas nada más. Como os iba diciendo, votan en fases porque son, como les gusta autodenominarse, la mayor democracia del mundo. Estamos hablando de más de 1300 millones de habitantes y 900 000 de ellos con derecho a voto.
Sin embargo, un problema que puede surgir a causa de las siete fases es que algunas personas estén registradas en más de un estado e intenten votar en todos. Para evitarlo, cada vez que una persona vota, se le hace una marca en la uña y la cutícula con tinta indeleble, como veis en la foto. Así queda marcado y no podrá hacer trampas.
La política en la India es complicada, así que no voy a meterme a fondo con ella. Solo os diré que el actual Primer Ministro (equivalente a nuestro presidente) es Narendra Modi, en el poder desde el 2014 (sus mandatos son de cinco años). Pertenece al BJP (Bharatiya Janata Party), que podríamos traducir por «el partido del pueblo indio». Este quiere lograr un segundo y último mandato, ya que estos están limitados por ley. Por el otro lado tenemos a Rahul Gandhi, del partido conocido simplemente por Congress (la forma larga sería «congreso nacional indio»), que se presenta por segunda vez. Congress estuvo al mando del país entre el 2004 y el 2014 con Sonia Gandhi primero, y Manmohan Singh después.
Como veis, estamos también ante un caso de bipartidismo y, para simplificar, os diré que el BJP es un partido liberal en lo económico y muy conservador en lo religioso. Por otro lado, Congress se considera centro izquierda. Vamos, que serían como nuestros PP y PSOE. Y en todo, ya que los casos de corrupción también persiguen a estos partidos indios.
Y nada, ahora tendremos que esperar hasta dentro de un mes para saber qué es lo que decide el pueblo. Os mantendré informados del resultado.
Autor de la foto de portada: Ankur Banerjee
Propietario del logo de las elecciones: Comisión para las Elecciones de la India
Foto de Modi y Gandhi: Global Panorama