Seleccionar página

Muchos de nosotros, cuando vamos a una boda, lloramos, ¿verdad? Todo es tan bonito: la pareja mirándose, el típico beso que todos corean, el primer baile de la pareja recién casada, el recuerdo de los que no están y se echan de menos… Sí, es normal que en una boda se llore. Lo que para mí no era tan normal era que la novia se cogiera el cuajo de su vida.

Vidai significa literalmente ‘despedida’. En esta ceremonia de las bodas hindúes, la recién casada se despide de sus padres. Lo tradicional era (y sigue siendo en muchas ocasiones) que la mujer se trasladara a casa de su nuevo marido, el cual vive con su familia: padres, abuelos, hermanos y mujeres e hijos de estos, si ya los tienen. Hoy en día hay matrimonios por amor, e incluso en los matrimonios concertados las parejas tienen a menudo unos meses para conocerse, ya sea en persona, ya sea por teléfono. Así se preparan para lo que se les viene encima una vez sean marido y mujer por gracia de los contactos de sus padres o matrimoniosindios.com. Antiguamente, sin embargo, en muchos casos, la pareja no se conocía hasta el día de la boda. Si ya puede ser difícil despedirte de tu familia en otras circunstancias, imaginaos en estas…

¿Siempre se llora? No. Yo conozco casos en los que no, pero también he visto a mis amigas deshacerse en lágrimas después de casarse por amor con sus novios. Incluso a la que decía que ella no creía que lloraría. Y eso que ninguna se mudaba después a casa de los suegros, sino que volvían a su propio hogar con sus maridos.

Y vosotros, ¿sois de llorar en las bodas?

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies